Como organizar un organigrama de aperturas
Como organizar tu primer organigrama de aperturas
Elección de la apertura
Cuando se comienza el estudio del ajedrez es recomendable elegir aperturas “simples” (generalmente asociadas a esquemas), con el fin de ir progresivamente entendiendo el manejo y comprensión de la misma: Planes estratégicos, estructura de peones, golpes tácticos, medios juegos relacionados, finales relacionados, etc.
Un ejemplo puede ser el Ataque Indio de Rey, una apertura que cumple con todos los requisitos necesarios para iniciar el complejo estudio de las aperturas, sirve para enfrentar varias respuestas del negro como la Defensa Francesa, la Defensa Caro-Kann, la Defensa Siciliana, etc.
En esta etapa es crucial no olvidar, que lo fundamental es comprender en primer lugar los finales y la estrategia, para recién pasar al estudio de las aperturas.
Es decir, que el tiempo que se le dedicará al estudio de las aperturas será muy inferior que a los otros temas mencionados con anterioridad.
Al respecto, el que fuera campeón mundial José Raúl Capablanca y el legendario entrenador Mark Dvoretsky, coinciden en afirmar que la mejor forma de estudiar el ajedrez es de lo general a lo particular.
Búsqueda de teoría
En general podemos utilizar la Enciclopedia de Ajedrez (ECO), tanto en su formato impreso, como digital. También puede ser de mucha utilidad revistas y libros actualizados, sin embargo, es importante tener mucho cuidado con la fuente, tanto por los autores de la misma (se debe dar preferencia a jugadores soviéticos y yugoslavos), como por la época de su publicación.
Esto no quiere decir que material antiguo relacionado al estudio de las aperturas no sirva, sólo que la idea es evitar tener que hacer comparaciones entre distintas fuentes, por todo el tiempo que se ocuparía en tal parangón.
Chequeo de la teoría
Este es uno de los puntos más importantes a la hora de estudiar una apertura, toda la teoría obtenida en el punto dos (Búsqueda de teoría); debe ser chequeada minuciosamente con motores de análisis, entre los más utilizados tenemos Komodo, Stockfish, Rybka, Houdini, etc.
Una vez realizado el chequeo se dejará la teoría con las correcciones (material final que se deberá entender y memorizar); muchas veces nos daremos cuenta que la información de la enciclopedia está errada (o con diferencias). Y por ende, ésta etapa es crucial.
Búsqueda de GM guía
Para realizar este punto es necesario saber manejar el programa Chessbase (o Chess Assistant), mediante el Informe de Aperturas obtendremos todas las estadísticas necesarias sobre una apertura en cuestión.
Entre ellas, la que nos interesa en este punto es los GM que han jugado la apertura que hemos seleccionado, considerando: nivel ajedrecístico del GM, cantidad de partidas y porcentaje de efectividad.
Para elegir a los GM guía se debe conocer la historia del ajedrez, tanto jugadores antiguos como contemporáneos (no sólo por ELO sino también por trayectoria, no olvidar que el ELO es del año 1971 en adelante).
Una vez identificado el GM guía se debe hacer un análisis completo de sus partidas. (o por lo menos una selección de éstas).
Elección de la variante a jugar
Es muy común que un GM juegue dentro de una misma apertura diferentes líneas. Por ende, se debe elegir qué línea específica se jugará. En general, deberá ser la línea más reducida en número de variantes.
Se debe señalar que llegar a manejar distintas líneas dentro de una misma apertura no es algo fácil, sólo lo da la combinación entre estudio de la teoría y la práctica. Al haber realizado todos los puntos anteriores ya se tendrá una visión más clara de la apertura que se desea jugar.
Con el paso del tiempo al manejar exitosamente una línea se puede comenzar el estudio de una segunda línea dentro de la misma apertura.
Práctica y Análisis de la Apertura
Todos los puntos anteriores convergen en este sexto, que será la base de todo nuestro conocimiento de una apertura determinada.
Se debe hacer hincapié que la única forma de lograr entender una apertura es mediante su estudio previo, la generación de su propia base de datos –con partidas propias y de otros jugadores-, sus propios estudios caseros y su respectiva práctica (“El estudio de una apertura es la construcción perenne del alumno”).
Se recomienda jugar la apertura tanto en partidas de ajedrez clásico (partidas sobre una hora de tiempo), hasta partidas blitz (no es recomendable jugar partidas inferiores a cinco minutos).
Lo ideal es siempre poder anotar las partidas para posteriormente realizar su respectivo análisis (con la anotación de quince movimientos se considera adecuado); no olvidar, que el análisis se debe realizar de la siguiente forma: primero, hacer el análisis utilizando el conocimiento ajedrecístico que uno posee.
Este punto no es fácil considerando que se está empezando a estudiar ajedrez, pero hay que acostumbrarse que somos nosotros los que jugaremos las partidas y no los módulos; segundo, utilizar el motor de análisis (Komodo, Stockfish, Rybka, Houdini, etc.) como una herramienta secundaria, con la idea de tomar sus recomendaciones como un aporte al análisis de la misma y no transformarse -como es muy común hoy en día- en el eco de los programas.
A esto se debe agregar, los entrenamientos que se pueden realizar aprovechando Internet y la informática.
Por ejemplo, tenemos el caso de ICC (Internet Chess Club), Chess24 u otras plataformas de la nube, donde se puede jugar con jugadores de todo el mundo y lo más importante de todo es que las partidas quedan grabadas en un archivo pgn para posteriormente ser analizadas.
El inconveniente de algunas web es que hay que pagar para tener una cuenta Premium (generalmente las cuentas gratuitas no permiten guardar el pgn).
En ese caso, se recomienda utilizar cualquier software de ajedrez que me dé la posibilidad de guardar las partidas en pgn, para posteriormente hacer el respectivo análisis.
Este planteamiento está orientado a jugadores que se inician en el juego (aficionados) y jugadores de un nivel promedio medio.